El reconocido cirujano brasileño falleció a los 93 años de un ataque cardíaco. Operó a decenas de famosos e hizo de su país un referente en esa especialidad médica.
El célebre cirujano plástico brasileño Ivo Pintaguy, que convirtió a Brasil en una de las potencias mundiales de la especialidad, murió este sábado a los 93 años de un ataque cardíaco en su casa de Rio de Janeiro, dijo a la AFP una portavoz de su clínica.
El renombrado cirujano, que operó a decenas de famosos, muchos de los cuales alojaba en su isla de Angra dos Reis, en el estado de Rio de Janeiro, cargó durante un trecho la antorcha olímpica de los Juegos de Rio en una silla de ruedas el viernes, en la víspera de su muerte.
“Ivo Pitanguy falleció hoy a las 17h30 (16:30 en Bolivia) en su casa de Gavea (…) Tuvo un ataque cardiaco”, dijo la portavoz Patricia Sallum.
“Será cremado mañana domingo en el Memorial do Carmo”, agregó.
Más respeto por la profesión
Pitanguy -autor de más de 1.800 publicaciones entre libros, capítulos de libros, prefacios, conferencias y artículos científicos- trabajó incansablemente por tornar la profesión más respetada.
“El sufrimiento del individuo no es proporcional a la deformidad y sí al trastorno a su armonía que puede provocarle convivir con su imagen“, dijo una vez al defender el derecho de los seres humanos a alterar su cuerpo o su rostro.
Refinado y de sólida formación , este hombre de baja estatura y delgado no por ello dejaba de admitir que el culto más importante no es al cuerpo sino “a la inteligencia”.
La excesiva preocupación con el cuerpo “no es culpa de la cirugía plástica, sino del marketing que vende la imagen de la juventud, de la belleza”, lamentó una vez en Madrid, hace una década.La cirugía estética es “para sentirse bien con uno mismo, no para los otros”, decía.
Lo que más le gustaba de las mujeres era la cintura. En una entrevista concedida al diario O Globo en 2010, aseguró ser “entusiasta” de la curva que va del seno a la cadera, que “lleva al infinito” y es la “marca de la feminidad”.
El médico, que operó a innumerables estrellas durante más de 50 años, se negaba a reconocer cuál era para él la mujer más bella. “Nunca digo cuál es la mujer más bella, porque cuando cito a una no nombro a las otras y me pongo triste”, explicó.
Pobres y ricos
Ivo Pitanguy fundó en 1963 su famosa clínica en Botafogo, donde operó a muchísimas actrices y actores de renombre mundial, a cantantes, políticos y hasta a reyes, según dijo una vez.
Pero también es conocido por haber realizado miles de operaciones a mujeres pobres, de forma gratuita, en el hospital público de Santa Casa da Misericordia.
El incendio de la carpa de un circo en 1961 en Nitéroi, al otro lado de la bahía de Guanabara en Rio de Janeiro, fue el momento más importante de su carrera.
Pitanguy, por entonces un joven médico que trabajaba en Urgencias y que se había especializado en cirugía plástica, operó durante tres días seguidos a centenares de quemados.
Y cuando luego se concentró en atender a los poderosos y famosos, su equipo siguió realizando todos los años decenas de operaciones estéticas y reparadoras para los pobres en el hospital Santa Casa de Rio.
Su fama mundial era tan grande que su clínica fue utilizada como “modelo” en una de las películas de la serie erótica “Emmanuelle”, cuando el personaje que interpreta Sylvia Kristel busca cambiar de identidad.
Fuente: eldeber.com.bo