Son muchos años ayudando a nuestros pacientes a pasar por un postoperatorio más cómodo y recuperarse de su cirugía plástica lo más rápidamente posible y de la mejor manera. Así que aquí os dejamos una lista con las 7 cosas que harán tu recuperación tras una cirugía mucho más sencilla, para llevar a la clínica y para tener en casa cuando vuelvas.
1. Medicación: En la clínica ya se encargan de minimizar los dolores y que sean simples molestias o incluso que no sientas ninguno. Aún así tu cirujano puede prescribirte una serie de medicamentos, por lo general orientados a evitar infección y a eliminar dolores. Tu cirujano te dirá qué medicamentos son exactamente y te recomendamos llevártela ya comprada al ingreso y así luego ni tú ni tu acompañante debéis preocuparos de eso y os dedicáis mejor a hablar de lo bien qué ha salido y está saliendo todo 🙂
2. Zumos y agua: De nuevo en la clínica van a darte la comida y bebida durante los turnos de comida y cenas, pero tras la anestesia algunos pacientes sienten sed, y es bueno rehidratar el cuerpo cuanto más mejor. Es por ello que siempre es bueno llevar zumos y agua, o bebidas isotónicas. Y que tengas unas cuantas de esto en casa. Recomendamos beber pocas cantidades muchas veces, aunque no apetezca. Además, puede ser útil tener pajitas, ya que según la cirugía (por ejemplo, una abdominoplastia) no es fácil incorporarse y no se trata de estar montando una odisea, más cuando pocos mortales tienen una cama que se eleve en su casa.
3. Mallas, sujetadores, materiales prescritos por el cirujano: Aunque parezca una obviedad, si tu cirugía plástica requiere llevar algún tipo de material por un tiempo (que te da el propio cirujano), como por ejemplo un sujetador especial en el caso del aumento de mamas, debes seguir las indicaciones al pie de la letra. No sólo garantizan un resultado óptimo sino que evitarás además todo tipo de complicaciones. Así que si dices, venga, un ratito esta malla fuera, ¡quien avisa no es traidor! Y además, nos vamos a dar cuenta…
4. Cremas hidratantes con factores de protección SPF 50 o más: En caso de llevar cicatrices en zonas visibles, has de protegerlas con la mayor protección solar del mercado. Compra de antemano cremas de calidad que puedes encontrar en farmacias. En cualquier caso, no se trata de operarte y ponerte al sol como una gamba, ¡sentido común!
5. Cómodos camisones o pijamas de algodón de repuesto: puede parecerte absurdo, pero un cambio de ropa respecto a la que llevas el día de la operación, un camisón suave o unos pijamas nuevos o recién lavados de algodón, te aportarán una sensación de bienestar y frescura. Para muchas de las cirugías es mucho más cómodo un camisón que un pijama (por ejemplo, en algunas cirugías como la abdominoplastia has de llevar una faja, y es mucho más cómodo ir al baño con un camisón que un pijama). Te informaremos de antemano.
6. Nube de cojines y almohadas: en casa, en tu sofá o en la cama, si te vas a echar o sentar, acomódate de la mejor manera posible, transforma tus zonas de descanso en los lugares más cómodos de la casa y evita zonas de corrientes y cambios bruscos de temperatura. Si tienes mascotas sabrás cuáles son, porque son donde ellos se ponen 🙂
7. Música de la buena, pelis, revistas: Vas a estar unos días out, aprovecha para disfrutar del tiempo leyendo tus revistas favoritas, viendo esas pelis que tienen ‘buen rollo’ y escuchar música que te dé energía positiva…
Con todos estos consejos más 700 gramos de paciencia y 300 de buen humor, harás del postoperatorio de tu cirugía plástica un lugar mucho más cómodo y feliz. Sobre todo ¡paciencia para ver y disfrutar de los resultados finales con el tiempo!
Fuente: antiaginggroupbarcelona.com